JCK, medio especializado en joyería, publicó recientemente las cinco tendencias de la década en materia de joyería, de cara a la AGTA GemFair, que se llevará a cabo en Tucson del próximo 4 a 9 de febrero. Entre ellas se encuentra la creciente importancia de la designación del país de origen como un factor determinante para incrementar el valor de una joya o una piedra preciosa, así como garantía de autenticidad para los compradores.
“Es tan grande el interés en este tema que al menos un país (Colombia) se está movilizando en torno a su principal piedra preciosa de exportación para crear una marca”, señala el artículo, y se remite a las palabras de Doug Hucker, CEO de la American Gem Trade Association (asociación de profesionales de comercio de Estados Unidos y Canadá dedicada a promover la estabilidad e integridad a largo plazo de las industrias de piedras preciosas de colores naturales y perlas cultivadas): «Los colombianos están trabajando muy fuertemente para crear una marca para las esmeraldas colombianas», dice Hucker, «quieren ser el Juan Valdez de las esmeraldas».
Precisamente durante el 2019 la Asociación de Productores de Esmeraldas Colombianas (Aprecol) lideró el desarrollo de la Denominación de Origen de la Esmeralda Colombiana, y está solo a la espera de la aprobación definitiva por parte de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC).
Con el proyecto de Denominación de Origen se busca generarle valor a la esmeralda a lo largo de la cadena, y será una importante defensa de esta gema frente al mercado internacional. A nivel interno, será además motor de desarrollo económico y social para la región del occidente de Boyacá, así como generador de empleo, no solo del sector minero sino de sectores complementarios, como las industrias creativas y culturales, incluso el turístico.
Fuente: JCK The Industry Authority
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