Compañías Muzo, a través de su Fundación, sigue sembrando prosperidad en el Occidente de Boyacá mediante la diversificación económica y el impulso de alternativas viables a la minería tradicional.
Tal visión se mantiene en el proyecto «Caciques del Cacao», que forma parte del propósito tanto de la fundación como del grupo de apostarle a un futuro sostenible. El proyecto comenzó en 2015 como una iniciativa de reconversión laboral dirigida a mineros de la región, con el objetivo de ofrecerles una alternativa productiva estable y sostenible para mejorar su calidad de vida y construir un futuro más prometedor, a través de un cultivo que tiene importantes beneficios a nivel social, económico y ambiental, como lo es el cacao. Con el transcurso de los años, el proyecto ha crecido, se ha consolidado y ha sido apropiado por quienes lo conforman, logrando un alcance y reconocimiento importante a nivel local, regional y nacional.
En lo corrido del 2024, la Fundación Muzo está apoyando a más de 170 familias de cacaocultores beneficiando a su vez a 900 personas, con el objetivo de convertir la agricultura en una fuente sólida de crecimiento económico para la región. Este esfuerzo no solo se limita a la entrega de insumos y equipos, sino que se acompaña de un proceso integral de formación, asesoría técnica y acompañamiento continuo, en cabeza del grupo de profesionales y técnicos agropecuarios de la organización.
Como parte de este proyecto, se entregaron este año 15.000 plántulas de cacao a través de 9 viveros comunitarios, y se realizaron 40 talleres de capacitación que cubren desde técnicas agrícolas hasta gestión empresarial, buscando aumentar la productividad, mejorar la calidad del grano seco de cacao y, por ende, generar una mayor rentabilidad para los cacaocultores y la asociación que los agrupa (Asorcacao), la cual fue creada en el 2016 con el apoyo de la Fundación Muzo, y a través de la cual en el 2024 se han comercializado más de 80.000 kilogramos de cacao de buena calidad, por medio de 4 puntos de compra y acopio del grano.
Por otra parte, se han apoyado 33 fincas para que recibieran la certificación en Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) con el ICA, lo que fortalece el compromiso con la implementación de prácticas responsables, el cuidado del medio ambiente, así como la promoción de la salud y seguridad de los productores, abriéndoles las puertas a nuevos mercados.
Por otra parte, se han implementado 5 parcelas demostrativas como estrategia para aplicar las buenas prácticas al interior de los cultivos, mostrando importantes resultados en términos de producción, lo cual genera motivación y confianza de ejecutarlas por parte de todos los integrantes del proyecto.
Este esfuerzo se complementa con el trabajo de innovación agrícola. Para promover mejores índices de productividad, la Fundación Muzo estableció una parcela investigativa con 8 clones diferentes de cacao, con el fin de generar conocimiento científico aplicable a la región con énfasis en establecer variedades de cacao deseables en cuanto a productividad, resistencia a plagas y enfermedades, tolerancia a condiciones climáticas y con características de sabor y aroma destacadas.
Paralelamente, para aumentar la calidad, se creó un laboratorio físico y sensorial en alianza con Fedecacao para analizar muestras de los productores en términos de humedad, peso, tamaño, así como sabor, aroma y textura, y poder guiarlos en la mejora de sus procesos de cosecha y poscosecha (fermentación y secado). Se resalta que a través de la Fundación se han entregado 65 áreas de beneficio, las cuales son fundamentales para el procesamiento poscosecha del grano de cacao.
“En 2025, esperamos seguir ampliando el alcance del proyecto «Los Caciques del Cacao» con mayores esfuerzos en temas en capacitación, asistencia técnica, entrega de insumos, investigación, acceso a mercados, entre otros, para seguir aportando al fortalecimiento continuo de la cadena productiva”, afirman en Fundación Muzo. Añaden que para lograr una transformación real y duradera en Boyacá, se debe trabajar en conjunto con las comunidades, brindando educación, apoyo técnico y alternativas sostenibles. Para ello, se busca crear empleos y fomentar una cultura de respeto por el medio ambiente y un modelo económico que sea inclusivo y equitativo para todos.
“En Compañías Muzo, seguimos comprometidos con el bienestar de las familias de la región, promoviendo un futuro próspero, donde cada acción que emprendemos contribuye a la paz, la esperanza y la prosperidad”, concluyen.
Fuente: Compañías Muzo Colombia
Fotos: Compañías Muzo Colombia